Tus hijos no son tus hijos

Tus hijos no son tus hijos
son hijos e hijas de la vida
deseosa de si misma.
No vienen de ti, sino a través de ti
y aunque estén contigo
no te pertenecen. 

Puedes darles tu amor,
pero no tus pensamientos, pues,
ellos tienen sus propios pensamientos.
Puedes abrigar sus cuerpos,
pero no sus almas, porque ellas,
viven en la casa del mañana,
que no puedes visitar
ni siquiera en sueños.

Puedes esforzarte en ser como ellos,
pero no procures hacerlos semejantes a ti
porque la vida no retrocede,
ni se detiene en el ayer.

Tú eres el arco del cual, tus hijos
como flechas vivas son lanzados.
Deja que la inclinación
en tu mano de arquero
sea para la felicidad.

Hahlil Gibran

Imagen Lara Balla

Si la cabeza te dice una cosa.

La coherencia estética

João Carita nació en Lisboa, aunque ahora, vive en Alcochete una preciosa villa portuguesa.

En términos artísticos, su obra se concentra fundamentalmente en la presencia de la figura femenina. Pudiendo ver el interés permanente del artista en simplificar la belleza de la mujer. 

A través de un estilo llamado "expresionismo Dark". Nos hace penetrar en un mundo cargado de mensajes de sexualidad, erotismo, misterio, expresión de la individualidad o la complejidad de las relaciones humanas. Todo ello con tal profundidad, que no te deja indiferente.

Espero que lo disfrutes
Joao Carita.

Si la cabeza te dice una cosa.

Con dinero

Con dinero puedes comprar sexo pero no el amor.
Con dinero puedes comprar una casa pero no un hogar.
Con dinero puedes comprar una cama pero no un sueño.
Con dinero puedes comprar un reloj pero no el tiempo.
Con dinero puedes comprar un libro pero no los conocimientos.
Con dinero puedes comprar alimentos pero no el apetito.
Con dinero puedes comprar una posición pero no el respeto.
Con dinero puedes comprar unas medicinas pero no la salud.
Con dinero puedes comprar un seguro pero no la tranquilidad.
Sin embargo, dando amor, puedes regalar y recibir todo lo que con dinero no puedes comprar.


Madre Teresa de Calcuta 
Imagen Jenny Meilihove

Si la cabeza te dice una cosa.

¡EXPRESA! por Tierra en mis pies

"Aquel día no me encontraba bien. Antes de acostarme me miré al espejo. “Está claro”- pensé – “mi cara y mis ojos lo reflejan todo”. No sabía qué hacer. Sabía que me encontraba mal, que no era yo, que había mil y una cosas que en ese momento me estaban bloqueando. Era consciente que el día había pasado con mucho ruido interno, que no había conseguido vivir ni disfrutar el presente. ¿Qué podía hacer? Sabía cual era mi estado actual –bloqueo, tristeza, desgana- y sabía cual era mi estado natural –calma, Belleza, pasión- pero en ese momento me sentía completamente vacía de recursos y fuerzas para cambiar aquel estado. Decidí, por lo menos, no irme a la cama así. Salí de la habitación de aquel pequeño albergue y me senté en un polvoriento y amable sofá que me acogió a aquellas tardías horas de la noche. Abrí mi libro de “Mapas para el éxtasis” de Gabrielle Roth y él me lo dijo todo:

“Para evitar sufrir no nos arriesgamos a expresar nuestros sentimientos. Nos habituamos a un estado de inercia emocional, a una especie de insensibilidad o adormecimiento generalizado, una muerte despiertos que nos protege del sufrimiento pero también nos impide sentir la alegría de vivir ahora o nunca.

Los sentimientos son reales. No son ideas que se puedan rechazar o desconectar. Son manifestaciones físicas de energía que unen al cuerpo y la mente y lo llevan al momento. Esta energía no expresada, reprimida o negada se vuelve tóxica para el cuerpo. Si no se libera, estalla emocionalmente de modo no proporcionado y llega a aflorar en forma de bultos, dolores, espasmos, jaquecas y otras dolencias físicas. La única opción real, la única alternativa sana es aceptar nuestras emociones, hacernos amigos de ellas, hacerlas propias y aprender a experimentarlas y expresarlas de forma apropiada en el momento. Para hacernos amigos de nuestros sentimientos podemos bailarlos, cantarlos, representarlos, escribirlos y pintarlos; podemos explorarlos y celebrarlos creativamente”.

Di Gracias por haber encontrado el motivo de mi malestar. Estaba claro que había algo dentro de mí merodeando que quería expresarse y danzar; y parecía que ese algo tenía muchas cosas que contarme. Con desgana pero con algo de valor, comencé a pensar cuál sería la forma de dejar aflorar esa sensación interna. Descarté BAILAR pues me encontraba en un lugar muy silencioso y no iba a poder expresar toda mi energía al 100%, pensé en ESCRIBIR pero lo descarté pues me encontraba completamente vacía de palabras. Finalmente, abrí mi diario, cogí un lápiz y con muy poco garbo e inspiración comencé a DIBUJAR trazos de lo que sería un nuevo dibujo.

Al principio, aquel dibujo no tenía ningún sentido, “¡qué feo es esto!”. Empecé con desgana, luego con mucha rabia y autocrítica. Apretaba fuerte el lápiz contra el papel, reforzaba una y otra vez las mismas líneas y, de repente, me di cuenta que no conseguía cerrar ninguna de las formas que estaba dibujando. Todo eran círculos abiertos, gotas de agua abiertas, óvalos abiertos… repasaba el contorno una y otra vez de aquella esfera que nunca llegaba a cerrarse. Mi atención pasó a querer entender qué estaba ocurriendo. Me di cuenta que sentía miedo, sentía miedo de “cerrar las formas”, que estaba cayendo en actos de repetición que no me llevaban a acabar nada, me percaté de la rabia acumulada que tenía y, poco a poco, comencé a relajarme. De repente, sin darme cuenta y de forma muy suave, acabé haciendo una gran gota de agua enorme que englobaba todas las figuras y por fín estaba cerrada. Me relajé.

Pasé de hoja, comencé otro dibujo ahora más calmada. Una Luna, una montaña, una hoja de un árbol, las estrellas… aquello me gustaba más, se parecía más al terreno en el que me sentía más cómoda. Pasé de página e hice un trazo final sencillo, precioso, muy inspirador… Y de repente, con un arrebato que no quise frenar y con mucho sentimiento aflorando desde muy adentro comencé a escribir :

“Te echo de menos, no lo puedo evitar. Quizás sea pasajero, ¿y qué más dará eso? Creo, siento, percibo y me atrevo a decir que sé que es pasajero pero… ¿el hecho de que sea pasajero me va a impedir vivir el momento presente que es lo que más importa?

Le echo de menos, quizás sea la noche. ¿Y qué? ¿Quién me dice a mí que mañana habrá día? ¿Por qué no puedo vivir plenamente la noche? Quiero explorar esta noche, zambullirme en ella, acariciar mis sentimientos, abrazarlos y quererlos. Quiero sentir, quiero abrir mis ojos en la oscura y acurrucada noche, quiero abrazarme, decirme que me quiero y ensalzar con alegría la tristeza de mis sentimientos.

Ahora LE QUIERO, ahora me abrazaría a él como si no hubiera un pilar más fuerte al que poder aferrarme, ahora dejaría caer mi adorado peso sobre él, ahora cerraría los ojos, abriría el corazón y sentiría el calor común creado por nuestros dos cuerpos. Ahora gritaría con la luz de mis ojos a la Luna que estoy viva, que Siento y que honro enormemente a cada una de las realidades que la vida me brinda y que brotan de mí con fuerza y con pasión”.

Cuando acabé de escribir esto no me lo podía creer. Con qué esto era lo que me pasaba. Increíble, ¡qué cierto era aquello que acababa de leer en el libro de Gabrielle Roth! Llevaba todo el día REPRIMIENDO algo que sentía de una forma muy pura. De verdad, estaba sorprendida. Pensaba que me encontraba mal por otros motivos, pensaba que aquella tristeza y aquella desgana venían de alguna emoción relacionada con cualquier otra cosa pero NO ME PODÍA IMAGINAR que lo que realmente me estaba sucediendo es que estaba COMPLETAMENTE ASUSTADA de enamorarme o querer mucho a alguien.

Fuf! Sentí un alivio grandioso, toda una liberación. Parecía que había corrido una maratón, me sentía completamente liviana, me había quitado un gran peso de encima. Fui al baño a mirar en el espejo mis ojos brillantes y verdaderos, sonreí y me fui muy feliz a la cama. A la mañana siguiente, conocía qué me sucedía, conocía qué me pasaba y solo tuve que ser natural, real y fiel a mis sentimientos. Le llamé y, dejando a un lado todos mis miedos, pasé todo el día con él expresando Aquello que realmente sentía. Era LIBRE otra vez.

Tenía muchas ganas de escribir esto en el blog. Desde mi corazón, solo quiero que TODOS seamos libres. Hágamonos a cada uno de nosotros el favor de dejar a nuestras EMOCIONES expresarse, es lo más sano y lo más bonito que podemos darnos a nosotros y a los demás. Si hay algo dentro de ti que no sabes qué puede ser (o sí lo sabes), ÉXPRESALO.

- Vete a un espacio, aunque sea muy pequeño. Ponte música que te inspire y BAILA. No pienses qué movimiento hacer, qué quedará o no quedará bonito. Solo escucha la música con tu corazón y muévete, de cualquiera de las maneras.
- Coge un lápiz, un papel y DIBUJA. Qué más da si es bonito o si es feo, simplemente deja que se exprese ahí lo que haya dentro de ti!

- Siéntate a solas y ESCRIBE. No desde la mente, no desde aquello que yo creo que me puede estar pasando y quiero contar. No desde la idea de un “comienzo-nudo-desenlace”. ¡Dispara! Dispara la primera frase que te venga a la cabeza. La segunda no tiene porqué tener relación con la primera. Dispara frases y palabras hasta que des con aquello que viene directo del corazón.

Baila, pinta, escribe, canta… Hagamos ARTE. Seamos valientes. Expresémonos. Empecemos a ser ¡VERDADERAMENTE LIBRES!"











Texto www.tierraenmispies.com

1ª Imagen Rafal Olbinski
2ª imagen Vladimir Kush

Si la cabeza te dice una cosa.

Una frase inspiradora

Si quieres algo en tu vida que nunca has tenido, tendrás que hacer algo que nunca has hecho.

Anónimo
Imagen Laura Balla

Si la cabeza te dice una cosa.

Momentos mágicos en la vida

Me siento atraída por este momento tan especial en la mujer. Soy madre y ese sentimiento de espera, cuando el embarazo llega a su fin y llega el momento culminante de ver a tu hij@ cara a cara. Me parece uno de los momentos más cruciales en la vida de una mujer.

No he tenido la experiencia de ser testigo, pero debe ser un honor poder estar presente en un acto tan íntimo, donde una mujer expresa su emoción y su sentimiento abiertamente. Solo pensando en la vida que lleva dentro y en estar ahí presente con todo su corazón.

Es particularmente curioso ese momento culminante de la entrega, cuando en los partos la tensión finalmente se rompe y hay lágrimas de alivio, alegría y amor.

Por ello me ha llamado tanto la atención, esta artista canadiense que retrata una madre llena de amor, con una expresión de dolor y paz al mismo tiempo.
En uno de los momentos más mágicos de su vida.


www.amandagreavette.com

Si la cabeza te dice una cosa.

Fábula hindú

El discípulo dijo al maestro:

- He pasado gran parte de mi vida viendo cosas que no debía ver, deseando cosas que no debía desear, haciendo planes que no debía hacer.

- El maestro invitó al discípulo a dar un paseo. Por el camino señaló una planta y preguntó al discípulo si sabía lo que era.

Es belladona.  Puede matar a quien coma sus hojas.

Pero no puede matar a quien se limite a contemplarla.  De la misma manera, los deseos negativos no pueden causar ningún mal, si tú no te dejas seducir por ellos.

Fábula hindú

Si la cabeza te dice una cosa.

Una frase inspiradora

Respetar las opciones del otro, es una de las mayores virtudes que un ser humano puede tener. Las personas son diferentes, actúan diferente y piensan diferente. 

No juzgues............ Solamente comprende.

Anónimo

Imagen Trish Grantham  

Si la cabeza te dice una cosa.

Un viaje al universo onírico

Este artista nació en Polonia y desde hace tiempo vive en New York. Su obra esta influenciada por los grandes del surrealismo clásico.

Toda su obra esta llena de paisajes oníricos e irreales, donde los personajes están integrados describiendo la mente como si se tratara del teatro de los sueños.

Puedes encontrar sus obras, en los más importantes Museos del mundo, en las revistas más internacionales The New York Times, Der Spiegel, Time, etc. debido a su trayectoria como ilustrador, asimismo como en numerosas colecciones privadas y corporativas de los Estados Unidos, Japón y Europa.

Espero que lo disfrutes

Rafal Olbinski

Si la cabeza te dice una cosa.

Una frase inspiradora

"No vemos las cosas como son, sino como somos".


J.Krishnamurti
Imagen Elly Mckay

Si la cabeza te dice una cosa.

Tú eres

Tú eres lo que es el profundo deseo que te impulsa.

Tal como es tu deseo es tu voluntad.

Tal como es tu voluntad son tus actos.

Tal como son tus actos es tu destino.

Brihadaranyaka Upanishad
Imagen Project Noah

Si la cabeza te dice una cosa.

Everybody Needs Somebody To Love

Nada como empezar esta mañana con una preciosa canción. Dale al botón del volumen y deja que tu cuerpo y tu mente decidan. 

Everybody Needs Somebody To Love o Todo el mundo necesita amar a alguien.

Espero que la disfrutes.

YouTube

Si la cabeza te dice una cosa.

Una frase inspiradora

Así como nos sentimos amados e importantes cuando alguien nos defiende y nos cuida, de igual manera la autoestima sube como la espuma cuando nos resistimos a ser sacrificados, utilizados o explotados.
Walter Riso

Imagen Wladimir Kush

Si la cabeza te dice una cosa.

Un estilo único e inimitable

Jim Warren es un ilustrador y pintor de EE.UU. Surrealismo, Ilustración, Cómic…y todo ello pintado al óleo. Jim, nos sorprende con un guiño salvaje y sensual, y un precioso toque de dulzura.

El mismo artista comenta en su Web. Que su filosofía del arte es: "Al diablo con las reglas...pinta lo que quieras." 

O palabras tan sencillas; como que su mayor logro hasta la fecha, es las muchas cartas y comunicaciones que recibe de personas que le dicen, que su arte los ha inspirado o que al ver su obra lograron que su día fuera un poco más brillante.

Disfruta de esta pequeña muestra de su obra

Jim Warren

Si la cabeza te dice una cosa.

Libros de autoayuda en las estanterías de los niños?

En ocasiones los “adultos” queremos que los niños y adolescentes lean los libros que consideramos “deben” leer, muchas veces sin pensar si son de su gusto o si esas historias forman parte de sus ilusiones o fantasías.

En otro sentido, se encuentran los llamados libros de “autoayuda” o desarrollo personal o didáctico. ¿Sería bueno que los niños se acercasen a “historias” para superar sus complejos?

Cada vez aparecen más títulos para ellos. Lecturas que invitan a la reflexión, a aprender a cuidarse, a expresar sus emociones y a compartir esos secretos que les hacen daño. Historias mágicas que abordan temas como el mundo interior, el afecto, la superación, la curiosidad, el esfuerzo o el saber escuchar.

 Aquí te dejo algunos de ellos. Pero, permíteme un consejo. No tomes nota. Ve a la librería…tomate tu tiempo y decide por ti mism@.

“El secreto de Milton” de Eckhart Tolle; Una herramienta más para que los padres enseñen a sus hijos a enfrentar los momentos difíciles.

“Cuentos para crecer” de Eduard Estivill y Montse Doménech; Al final de cada cuento, consejos útiles y un ejercicio práctico para que los niños asimilen lo que han leído.

“¿Quién se ha llevado mi queso?" de Spencer Johnson. Una metáfora de la felicidad, que aborda la realización personal enfocada a los más pequeños.

“Los secretos de Julieta” de Reiman Mariela, Czarny, Marcela y Urbas Andrea. A través de Julieta, los niños y niñas descubren que pueden (y deben) decir SÍ a aquello que les hace bien y decir NO a lo que no les gusta o les provoca daño.

“Ay!!! Cuanto me quiero” de Mauricio Paredes, El es el centro de atención de todos los que han tenido la suerte de conocerlo: sus padres, su profesora, su vecina…

Un abrazo de Amor para todos los niños del mundo.

Si la cabeza te dice una cosa.

Los niños aprenden lo que viven

Si los niños viven con crítica
Aprenden a condenar.
Si los niños viven con hostilidad
Aprenden a vivir con agresividad.
Si los niños viven el ridículo
Aprenden a ser tímidos.
Si los niños viven con vergüenza
Aprenden a sentirse culpables.
Si los niños viven con tolerancia
Aprenden a ser pacientes.
Si los niños viven con aceptación
Aprenden a Amar.
Si los niños viven con reconocimiento.
Aprenden que es bueno tener una meta.
Si los niños viven con solidaridad.
Aprenden a ser generosos.
Si los niños viven con estímulo
Aprenden a confiar.
Si los niños viven con alabanza
Aprenden a apreciar.
Si los niños viven con honestidad
Aprenden que es la verdad.
Si los niños viven con seguridad
Aprenden a tener fe en si mismos y en los demás.
Si los niños viven con aprobación
Aprenden autoestima.
Si los niños viven con aceptación y amistad
Aprenden a respetar a los demás
Si los niños viven con afecto.
Aprenden que el mundo es un maravilloso lugar donde vivir.

Dorothy Law Nolte.
Imagen Betania Zacarias

Si la cabeza te dice una cosa.

La figura del viajero

Eduardo Úrculo es un pintor español.Su obra esta expuesta en los principales Museos de Arte Contemporáneo y sus exposiciones han recorrido las principales ciudades del mundo.

Es uno de los máximos exponentes de la pintura pop española. Un artista que retrató a un ser humano itinerante, utilizando el equipaje y el sombrero, como una referencia romántica. 

Representa también, la soledad del hombre moderno. Con esos personajes de mirada ausente ataviados con sombrero y siempre de espaldas al espectador.

Espero que disfrutes de este singular pintor.

Eduardo Úrculo

Si la cabeza te dice una cosa.

Arroz de cigalas

Arroz de cigalas 6 personas

Ingredientes:
2 cigalas por persona
1 cabeza de rape
250 g. de galeras
50 g.de pimiento rojo
30 g. de coliflor
30 g. de brócoli
6 ajetes tiernos
3 tomates rojos
Aceite de oliva medida: 2 dedos de altura en una sartén de 20.
90g. de arroz por persona o 120g. si es plato único.
Medida del agua: 2 vasos y medio de caldo por vaso de arroz.
Sal, pimienta y azafrán al gusto.

Caldo para el arroz
En una sartén sofreír el pimiento troceado y 1 de los tomates con 2 cucharadas de aceite. Echar a una cazuela y hacer un caldo con la cabeza de rape, las galeras y las cabezas, patas y cáscaras de las cigalas. Añadir un poco de sal.
Hervir unos 40 minutos y colar, apretando bien las galeras y las cigalas para que no se queden ningún sabor y apartar.

Arroz de cigalas
En una sartén sofreír la coliflor y el brócoli troceado pequeñito y retirar.
Sofreír los ajetes y retirar.
Sofreír los 2 tomates hasta que elimine el agua y su pulpa quede bien frita.
Echar el arroz en la sartén y darle una vuelta con el tomate.
Todos estos pasos en el mismo aceite y misma sartén.
Poner ya en la paella el arroz ya sofrito, incorporar las verduras que hemos sofrito y añadir el caldo que hemos preparado.
Pimienta y azafrán.
Rectificar de sal cuando ya lleve en ebullición 5 minutos.
Añadir por encima las colas de las cigalas a los 10/15 minutos de empezar la ebullición.

Un consejo es que el arroz lo hagas siempre en una paella que quede lo más plano posible, que el fuego abarque toda la paella y que nunca pare la cocción.

Y sonríe, te ha quedado preciosa y riquísima.

Es una comida especial ya que las cigalas es un producto caro pero todos tenemos un día “especial”.

Si la cabeza te dice una cosa.

Catálogo de Besos

Hay personas que coleccionan sellos, gatos de porcelana, búhos de ojos asustados… Amanda coleccionaba besos.

Amanda, la coleccionista de besos, nos ha dejado los besos que la marcaron conservados en frascos de cristal y todos cuidadosamente etiquetados. En cada etiqueta se define un beso con delicadeza y de cada frasco escapa una historia cuando se abre.

Para aquellos a los que les gustaría abrir sus labios a nuevas experiencias.

Y todo ello, en un libro con aspecto “infantil” para todos aquellos adultos que nos gustan las historias sencillas pero reales.

Preciosas las ilustraciones.

Gracias Inés por tu recomendación…Es precioso y cuantos de esos besos parecen propios.

Catalogo de Besos de Raquel Díaz Reguera
Catalogo de besos

Si la cabeza te dice una cosa.

Te deseo

Te deseo primero que ames,
y que amando, también seas amado.
Y que, de no ser así, seas breve en olvidar
y que después de olvidar, no guardes rencores.
Deseo, pues, que no sea así, pero que sí es,
sepas ser sin desesperar.

Te deseo también que tengas amigos,
y que, incluso malos e inconsecuentes
sean valientes y fieles, y que por lo menos
haya uno en quien confiar sin dudar.

Y porque la vida es así,
te deseo también que tengas enemigos.
Ni muchos ni pocos, en la medida exacta,
para que, algunas veces, te cuestiones
tus propias certezas. Y que entre ellos,
haya por lo menos uno que sea justo,
para que no te sientas demasiado seguro.

Te deseo además que seas útil,
más no insustituible.
Y que en los momentos malos,
cuando no quede más nada,
esa utilidad sea suficiente
para mantenerte en pie.

Igualmente, te deseo que seas tolerante,
no con los que se equivocan poco,
porque eso es fácil, sino con los que
se equivocan mucho e irremediablemente,
y que haciendo buen uso de esa tolerancia,
sirvas de ejemplo a otros.

Te deseo que siendo joven no
madures demasiado de prisa,
y que ya maduro, no insistas en rejuvenecer,
y que siendo viejo no te dediques al desespero.
Porque cada edad tiene su placer
y su dolor y es necesario dejar
que fluyan entre nosotros.

Te deseo de paso que seas triste.
No todo el año, sino apenas un día.
Pero que en ese día descubras
que la risa diaria es buena, que la risa
habitual es sosa y la risa constante es malsana.

Te deseo que descubras,
con urgencia máxima, por encima
y a pesar de todo, que existen,
y que te rodean, seres oprimidos,
tratados con injusticia y personas infelices.

Te deseo que acaricies un perro,
alimentes a un pájaro y oigas a un jilguero
erguir triunfante su canto matinal,
porque de esta manera,
sentirás bien por nada.

Deseo también que plantes una semilla,
por más minúscula que sea, y la
acompañes en su crecimiento,
para que descubras de cuantas vidas
está hecho un árbol.

Te deseo, además, que tengas dinero,
porque es necesario ser práctico,
Y que por lo menos una vez
por año pongas algo de ese dinero
frente a ti y digas: “Esto es mío”.
sólo para que quede claro
quién es el dueño de quién.

Te deseo también que ninguno
de tus defectos muera, pero que si
muere alguno, puedas llorar
sin lamentarte y sufrir sin sentirte culpable.

Te deseo por fin que, siendo hombre,
tengas una buena mujer, y que siendo
mujer, tengas un buen hombre,
mañana y al día siguiente, y que cuando
estén exhaustos y sonrientes,
hablen sobre amor para recomenzar.

Si todas estas cosas llegaran a pasar,
no tengo más nada que desearte.

Victor Hugo

Imagen   Andrea Arroyo

Si la cabeza te dice una cosa.

I love you

Te quiero...envíaselo a todos aquellos a quienes amas. 

Espero que te guste.

I love You

Si la cabeza te dice una cosa.

Una frase inspiradora

No hay por qué rodearse de personas que no nos hacen bien y/o que nos hacen pensar cosas como que; no somos lo “suficientemente” buenos o que si trabajamos duro y somos mejores... quizás algún día podamos ser suficientemente dignos.
Ésa no es la clave... Es hora de decir: Esto me perjudica y debo dejarlo.

Melodie Beattie

Imagen Geraldine Alibeu

Si la cabeza te dice una cosa.

A pesar de todo

A pesar de esta apatía
que bosteza enmohecida.
A pesar de muchas broncas
que quedaron escondidas.
A pesar de mis fracasos,
mis pecados, mis caídas.
A pesar de que se duermen
mis sentidos por rutina.
A pesar ya de ilusiones
que están por siempre dormidas,
y de fantasmas internos
prendidos de mis pupilas.
A pesar de que me invento
muchas veces la sonrisa.
A pesar de que me trague
mis verdades, mis mentiras.
A pesar de mis defectos,
de mi cólera, de mi ira,
de mis eternos miedos
que desde mi alma silban,
y que viva disfrazando
mis pequeñas cobardías.
A pesar de mi pasado
que me espía a escondidas.
A pesar de mis angustias
que rasguñan mis costillas.
A pesar de mi energía
que se agota, se termina,
y del paso de los años,
de mis luchas, mis heridas.
A pesar de todo eso…
¡Sigo apostando a la vida!


Carlos Alberto Boaglio (En Voz Baja)

Si la cabeza te dice una cosa.

El dibujo hecho arte

Adán Simpson curso sus estudios en Londres. Su obra mantiene un fuerte énfasis en el dibujo.

Adam ha contribuido a importantes exposiciones y ferias del libro en Londres, Nueva York, Edimburgo y Bolonia, así como en numerosos museos de arte japoneses. 

Entre otros trabajos importantes destaca el de Rhode Island School of Design en Estados Unidos y la pintura de un mural de 60 pies en su ciudad natal de Leicester.

Adán trabaja desde su estudio en el norte de Londres.

Adam Simpson

Si la cabeza te dice una cosa.

Una antigua fábula india

Cuenta una antigua fábula india, que había un ratón que estaba siempre angustiado porque tenía miedo del gato.

Un mago se compadeció de él y lo convirtió... en un gato.

Pero entonces, empezó a sentir miedo del perro. De modo que el mago, lo convirtió en perro. Luego empezó a sentir miedo de la pantera, y el mago lo convirtió en pantera. Con lo cual comenzó a temer al cazador.

Llegado a este punto, el mago se dio por vencido y volvió a convertirlo en ratón, diciéndole:
 "Nada de lo que haga por ti va a servirte de ayuda, porque siempre tendrás el corazón de un ratón."

Si la cabeza te dice una cosa.

Manos, arena y alma

Ilana Yahav es una artista israelita que con tan solo sus dedos crea animaciones con arena.

Con sus manos, música y luz sobre una tabla de vidrio, construye sus obras. Todas ellas llenas de imaginación y serenidad.

Que lo disfrutes!

 YouTube Ilana Yahav

www.sandfantasy.com 

Si la cabeza te dice una cosa.

Sabes lo que significa amar?

¿Sabes lo que significa amar a alguien? ¿Sabes lo que significa amar un árbol, un pájaro o un pequeño animalito, cuidarlo, alimentarlo , acariciarlo, aunque no recibas nada a cambio, aunque el árbol no te dé sombra, ni que el animalito te siga ó dependa de ti?.

Casi nadie ama de esta manera, no sabemos en absoluto lo que esto significa, porque nuestro amor está siempre obstruido por la ansiedad, por los celos y el temor. Lo cual implica que dependemos internamente de otros y necesitamos que se nos ame.

No amamos simplemente y lo dejamos ahí, sino que pedimos algo a cambio; y en ese mismo pedir nos volvemos dependientes.


J.Krishnamurti 
Imagen Project Noah

Si la cabeza te dice una cosa.